- 1 cucharada de mostaza amarilla
- 3 cucharadas de malta de maíz
- 1 cucharada de zumo de jengibre fresco
- 1 cucharada sopera de aceite de sésamo
- 3 cucharadas soperas de sake
- 6 cucharadas soperas de miso de arroz
- 2 cucharadas soperas de perejil picado
Rallar el jengibre con un rallador de porcelana hasta obtener una cucharada de zumo. Mezclar en un mortero dentado todos los ingredientes, teniendo la precaución de poner el perejil al final. No se cocina, lo mismo que las vinagretas.
Es una salsa con sabor potente indicada para platos como un pescado al horno o con el Áspic de gambas.