
Los científicos del laboratorio de investigación gastrointestinal en la universidad McGill en Canadá informaron de que una sustancia contenida en las algas kombu podía reducir entre un 50 y un 80 por ciento la cantidad de estroncio radiactivo absorbido a través del intestino.
El alginato de sodio contenido en las algas, permitía que el calcio fuese normalmente absorbido a través de la pared intestinal, mientras ligaba al estroncio que era eliminado del cuerpo a través de las heces.
Este estudio se hizo para ver el modo de contrarrestar los efectos de la lluvia radiactiva y de la radiación. Por eso clasificamos las algas marinas como alimentos/medicamento, en este caso altamente descontaminantes.