La depresión II

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¿Os habéis parado alguna vez a pensar en la frase “mens sana in corpore sano”?. El cuerpo es el templo del espíritu, es la casita donde vives tú, y los hábitos alimenticios entre otras cosas son determinantes en el estado de ánimo. Pensemos en una persona que tenga los pulmones llenos de nicotina, el hígado lleno de cafeína y los intestinos llenos de cadáveres en descomposición…. ¡Ahí no hay quien viva!.

Continuación del post: «La depresión I»

Los agentes causales externos de la depresión son difícilmente controlables por el paciente ya que muchas veces no dependen de él. No ocurre lo mismo con la dieta ya que puede elegir entre tomar alimentos saludables o tomar comida-basura. Por eso ponemos la dieta en el primer lugar como recurso terapéutico.

Aumento de la permeabilidad intestinal

La permeabilidad intestinal aumentada es uno de los factores que producen una inflamación generalizada. La mucosa intestinal tiene una permeabilidad selectiva y cuando esta aumenta, la barrera intestinal pierde su función protectora y pasan al torrente sanguíneo alimentos parcialmente digeridos, toxinas, microbios, etc. Estas sustancias afectan negativamente al funcionamiento del sistema nervioso.

Un desequilibrio en nuestra flora intestinal puede provocar un aumento de la permeabilidad de la mucosa por sobrecrecimiento bacteriano, aumentando los niveles de inflamación.

La inflamación

Existe un creciente número de pruebas que demuestran que la depresión está asociada a una respuesta inflamatoria de bajo grado. Resulta llamativa la asociación de los síntomas depresivos con enfermedades inflamatorias y autoinmunes como el asma, la enfermedad obstructiva pulmonar, las alergias, etc.

Alimentos contraproducentes

Los alimentos que definimos como yin (azúcar, bolos, galletas…) consumidos en exceso, son responsables de la inflamación de las mucosas y del aumento de la permeabilidad de la pared intestinal.

En la etapa pediátrica se introducen las frutas crudas y la leche de vaca muchas veces cuando el aparato digestivo del bebé sólo tolera la leche materna porque no ha madurado todavía.

¿Qué comer para vencer la depresión?

  • El primer requisito es tomar alimentos integrales y biológicos ya que son fuentes óptimas de elementos protectores como las vitaminas, minerales y antioxidantes. Estos alimentos los tomaremos preferentemente en grano y el cereal base será el arroz integral.
  • Como aporte de proteínas daremos prioridad a las legumbres, por su alto contenido en fibra y su bajo contenido en grasa. Si tomamos alimentos animales los pescados serán más abundantes que las carnes y tendremos precaución con las temperaturas de cocción.
  • Como aporte de ácidos grasos ω3 que son moduladores de la inflamación tomaremos semillas y frutos secos, dando preferencia a las semillas de lino por su equilibrio entre los ácidos grasos ω3 y ω6.
  • Añadiremos kuzu a nuestros platos ya que es un fortalecedor de los intestinos, un restaurador de las mucosas y un auténtico alimento-medicamento.
  • El miso será de consumo diario en forma de caldos y/o sopas con la finalidad de regenerar nuestra flora intestinal. La sal y los condimentos salados deberán estar presentes en nuestros platos con la finalidad de tonificar y activar nuestro sistema vital.

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