La ciruela umeboshi II

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Continuación del post: “La ciruela umeboshi I”


Efectos fisiológicos de la umeboshi

Prevención de la fatiga La acidosis metabólica es responsable de la fatiga y el cansancio. Esta condición de la sangre se produce cuando consumimos alimentos energéticamente extremos, tanto yin como yang y la acidosis respiratoria se produce cuando no respiramos profundamente y el aporte de oxígeno es escaso. La acidificación nos hace más susceptibles a las infecciones, daña al hígado y a los riñones. La umeboshi es el remedio perfecto por su poderoso efecto alcalinizante.
Prevención del envejecimiento. El envejecimiento se expresa en términos de oxidación y la umeboshi es también un poderoso antioxidante.

Estimulación de la desintoxicación Como es un estimulante del metabolismo, activa continuamente a las células, particularmente al hígado y a los riñones que son los encargados de la desintoxicación de la sangre. El efecto combinado de estos tres efectos fisiológicos hace que el cuerpo rejuvenezca y produce un aumento de vitalidad.

Formas de utilización de la umeboshi

Natural Se puede tomar tal cual o remojada en un poco de agua o té kukicha. También se pueden poner unos trocitos de umeboshi en las bolas de arroz (onigiri). Está indicado tomarla de esta manera en los siguientes casos: mucha acidez de estómago, problemas intestinales, cansancio, o como antídoto del azúcar.

Umeboshi carbonizada Ponemos en el horno varias ciruelas a fuego medio alto hasta que la superficie quede carbonizada. Las reducimos a polvo y guardamos el polvo en un bote hermético. Tomaremos una cucharita de este polvo en una taza de agua caliente o de té kukicha en los enfriamientos, las diarreas, úlceras de estómago, tuberculosis intestinal y cáncer intestinal. El efecto del horno es aumentar el efecto yang de la umeboshi. En los enfriamientos de los niños, usaremos kombu carbonizada en vez de umeboshi porque es más suave.

Ume-so-bancha Preparamos una taza de de te kukicha, dos cucharillas de tamari y una cucharilla de puré de umeboshi; añadimos una cucharilla de zumo de jengibre o en su defecto de jengibre en polvo. Se mezcla bien y se toma caliente.
Está indicado en casos de dolor de cabeza causado por un consumo excesivo de alimentos yin, en casos de náuseas y falta de apetito, en situaciones de cansancio, en las anemias y en intoxicaciones por monóxido de carbono. Esta preparación no es para niños a los que daremos umeboshi con kuzu.

Jugo de umeboshi Es el líquido que queda en el barril de la fermentación; en casa podemos obtener algo semejante hirviendo unas cuantas ciruelas en un poco de agua o  té kukicha. Es un preparado muy yang que se puede usar como sustituto de la sal en las quemaduras, para duchas vaginales, en aplicaciones en la piel en casos de eccemas infecciosos, en disenterías, intoxicaciones… como un antiséptico.

Umeboshi con kuzu Disolver una cucharita de kuzu en un poco de agua fría, trocear una ciruela o usar una cucharilla de puré de umeboshi con una taza de agua. Calentar removiendo hasta que hierva. Se le puede añadir una pizca de jengibre rallado y una cucharita de tamari. Puede ser usado en casos de debilidad, falta de vitalidad, enfriamientos, problemas digestivos o intestinales. En una diarrea podemos tomar el preparado 2 ó 3 veces al día hasta que cese.

Té con kuzu y umeboshi Ver la forma de preparación en el enlace: «Té kukicha con kuzu y umeboshi». Es la forma más universal de tomar la umeboshi. En el preparado se produce una sinergia positiva, donde se potencian los efectos del té, del kuzu y de la propia umeboshi.

Té de umeboshi Hervimos una umeboshi en un cuarto de litro de agua durante media hora. Si es necesario, se añade más agua. Es excelente como bebida refrescante fría.

Continúa en el post: “La ciruela umeboshi III”

 

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